martes, 27 de octubre de 2015

''El mundo lo mueven las personas que saben ESCUCHAR''
Si te pidieses que puntuaras tu vida del uno al diez, ¿qué puntuación le darías?
Yo le daría un 8, he tenido mis altibajos pero estoy contenta con lo que llevo vivido.

La frase que habéis leído al inicio de esta entrada es mi lema, tuve que crear una frase que hablara sobre mi vocación y sobre mí.
Para que entendáis a donde quiero llegar necesitáis saber que este año me saqué el título de técnico de laboratorio.

¡¡¡¡Soy técnico de laboratorio!!!!! 

Aún no me acostumbro a decirlo/leerlo porque fue tal el sufrimiento y el sacrificio del último año que me cuesta, me cuesta creerlo. Pero lo conseguí e hice la FCT en el laboratorio de hematología del Infanta Cristina.
Cada día salía enamorada de los aparatos, de mis compañeros, del trabajo que realizaba, pero curiosamente un día volviendo a casa en el bus me surgió una pregunta. Yo cogía el C1, un bus que pasa por un barrio que no tiene muy buena fama, a la hora de comer, con los niños saliendo del cole, corriendo de un lado a otro por el autobús, las madres gritando,...Un alboroto tremendo, yo iba con mis auriculares pero ese día yo no escuchaba la música, me escuchaba a mi y fue ese día, en ese autobús revuelto, en ese preciso momento cuando descubrí mi vocación.

Lau, ¿realmente es esto lo que quieres? Tienes veinte años, ¿te ves el resto de tu vida realizando análisis de rutina?

Obviamente la respuesta estaba clara. No, no me veo y no estoy diciendo que sea un trabajo aburrido, por supuesto que no. Es un trabajo muy importante, imprescindible y con el que aprendes a diario pero yo...yo quiero más. Soy curiosa, me gusta conocer lo desconocido, necesito más.


Actualmente en el mundo existen entre 5.000 y 7.000 enfermedades raras. Por si no sabéis lo que son las enfermedades raras son aquellas que afectan a un porcentaje muy pequeñito de la población.
Si comparamos nuestra vida, la que puntuamos hace un momento, con la vida de una persona que padezca una e.r. o con la de una persona cercana a otra que la padezca puedo aseguraros que la nuestra es de 10 y porque 10 es el máximo, que si el máximo fuera 20 sería de 20 y si el máximo fuera 100 sería de 100.

Gandhi dijo una vez que el hombre no posee la capacidad de crear vida y que tampoco posee, por consiguiente el derecho a destruirla.
Estas personas son tratadas como productos, investigar su enfermedad no es rentable porque no se obtiene beneficio. A estas personas no se las escucha. Es triste porque son luchadores innatos, con una sonrisa siempre para regalarte, no pierden la esperanza. Y si hay alguien que merece ser escuchado son ellos.

Yo no quiero fama, no quiero una gran cantidad de dinero, yo quiero éxito, entendiendo éxito como satisfacción personal y mi satisfacción personal sería saber que el trabajo que estoy realizando, el cual amo, no solo me aporta beneficios a mi, sino que también le da la oportunidad de tener una vida digna a esas personas que no son escuchadas.

Entonces, ¿me ayudas a mover el mundo?




miércoles, 21 de octubre de 2015

Mi huella.

Estoy viviendo unos días muy intensos emocionalmente, cada mañana sale de casa una Lau cazurra y vuelve una completamente distinta. Parece un tontería pero en tres días he conseguido iniciar el cambio que llevaba intentando introducir en mi vida desde hace años.
Como diría Borja Vilaseca, he empezado a remover los cimientos sobre los que me he construido, por muy endurecido que esté el cemento, que lo está. Lo más importante ya está hecho, sé que tengo que cambiar ciertos aspectos que obstaculizan mi camino. Puedo deshacerme de ellos o convertirlos en mi fortaleza.
Ahora toca demostrar perseverancia y ganas por mejorar que es quizás lo más costoso, porque el camino es largo pero, mas ya he recorrido parte de él y estoy orgullosa. Sé puede cambiar, simplemente es cuestión de voluntad.

Estoy aprendiendo mucho sobre mí, recuerdo que hace dos años tuve que hacer una lista con virtudes y defectos, me costaba horrores completar la columna de las virtudes, sin embargo la de defectos estaba a rebosar.

¿Os podéis creer que ahora me pasa todo lo contrario?

Estamos tan obcecados con cambiar todo lo malo que no le damos valor a nuestras virtudes. ¿Sabéis que nos pasamos 14 horas al día reprochándonos cosas? Y esas 14 horas son prácticamente las horas que no dormimos.

Que ahora sepa apreciar mis virtudes no significa que me haya olvidado de lo que aún debo cambiar, de hecho ahora me encuentro más fuerte que nunca para hacerlo.
Curiosamente esta entrada se me ha ocurrido mientras completaba un ejercicio que se llama '¿En qué he dejado huella?' debo hacerle dos preguntas sobre lo que recuerdan de mí a personas que han pasado por distintas etapas de mi vida (infancia, adolescencia, universitaria y profesional) y me ha llamado la atención que casi todos coinciden en lo mismo. Ha sido un proceso lento, veintiún años que se dice pronto, pero he ido creando y manteniendo mi personalidad.
Es increíble como son los recuerdos, como hablan de nosotros. Me ha sorprendido especialmente algo de lo que yo no era consciente y la gran mayoría de personas a las que les he preguntado me han dicho.

'Lo primero en lo que pienso cuando te recuerdo es tu sonrisa, una sonrisa cautivadora.'
'Lo que recuerdo es tu sonrisa, siempre, siempre que te veo me recibes con una sonrisa.'
'Te recuerdo como una chica muy risueña.'

Es algo que me ha encantado. Porque siempre ha sido algo natural, nada premeditado y me gusta, me gusta que me recuerden así.
Hayan durado más o menos las relaciones todos han sido capaces de captar mi esencia, porque si han coincidido es que seré así y me gusta lo que he leído. No sabía la imagen que proyectaba, sé la que quiero dar y ahora me he dado cuenta de que no distan mucho una de otra.
Este ejercicio ha reunido lo que tengo que cambiar, virtudes que ya conocía y otras muchas de las que no era consciente y ha sido muy productivo.

¡Me gusta la huella que he dejado en estas personas! Pero lo más importante de todo es lo orgullosa que estoy de haber podido contar o de seguir contando con ellos, los amigos son la familia que se elige y yo he reunido a una gran familia. ¡Gracias!


Y dime, ¿qué huella has dejado tú?

lunes, 19 de octubre de 2015

Lo que aprendí un 19 de octubre

``Ya somos triunfadores, son trescientos millones de espermatozoides los que compiten por fecundar el óvulo y solo uno lo consigue, y ese uno somos nosotros´´
Creo que no hay mejor manera de empezar este lunes nublado que escuchando a Elena, la mujer que imparte el curso de Empleabilidad y Habilidades Sociales. Es increíble como ha conseguido tener mi mente trabajando durante cinco horas.
Elena es una mujer muy positiva, muy viva y consigue transmitirlo con cada palabra que sale de su boca. Me veo un poco reflejada en ella, especialmente en su forma de ver la vida.

Hoy he aprendido que las emociones ni son buenas ni son malas, simplemente son emociones y hay que saber controlarlas. La inteligencia emocional es la capacidad que tienen las personas para controlar las emociones. Consiste en saber interpretar nuestros sentimientos y los de aquellos que nos rodean. Si somos inteligentes emocionalmente hablando entonces la vida nos resultará mucho más sencilla.

¿Sabéis que tan solo conocemos un 7% de nuestra personalidad? El 93% restante está oculto y solo en ciertas situaciones quizás salga a la luz. ¿No os parece increíble? Probablemente la mayoría de la gente no llega a conocerse nunca, es una locura. Y si no nos conocemos, ¿cómo vamos a controlar nuestras emociones?

Conocerse completamente no es algo imposible y mucho menos es necesario vivir situaciones extremas para poder hacerlo. Hay personas que tienen la capacidad de verse desde fuera, saben que tienen que cambiar y cual es su punto fuerte. A la mayoría nos cuesta un poco más pero quizás sea porque no nos concedemos unos minutos a solas con nosotros mismos.

También hay que aprender a valorar lo bueno, que le damos tanta importancia a todo lo que tenemos que cambiar que a veces olvidamos que en nuestras virtudes está la clave del éxito. Utilizar eso que nos hace diferentes, únicos, es lo que nos va a ayudar a conseguir nuestros objetivos.

Hoy he aprendido una barbaridad de cosas y no hay nada más reconfortante. Dice Elena que hay que tener un foco, un objetivo claro en nuestra vida porque nuestro cerebro es un poco perrete y si no le das unas pautas a seguir a veces se pierde y nosotros con él. El objetivo de mi vida lo tengo claro, ser feliz, pero eso ahora es muy genérico. Probablemente solo podré decir que he cumplido mi objetivo cuando mire hacia atrás y vea que he exprimido cada momento, cada instante, cada segundo de mi vida.
Así que por ahora mi objetivo va a ser conocerme mejor, explotar mis virtudes y cambiar todo lo que no me hace bien. Voy a aprender, a arriesgar, a equivocarme, a sentir, que al fin y al acabo en todo eso se basa mi objetivo principal.




miércoles, 7 de octubre de 2015

Declaración de intenciones.


'' Una declaración de intenciones es un escrito que transmite los objetivos y propósitos que mueven a una persona a emprender una actividad en particular. ''

¿Por qué una declaración de intenciones? ¿Por qué la primera entrada que escribo sobre ti empieza de forma tan rara? No lo sé, curiosamente siempre que se trata de ti mi capacidad para expresarme se reduce de forma considerable.
Hoy vengo a intentar expresar por escrito esos objetivos y propósitos que me mueven a emprender una actividad en particular. ¿O quizás sería más correcto decir una actividad muy particular?
Porque lo mires desde donde lo mires nuestra historia es particular. Es una historia especial, distinta, una locura a los ojos de los demás, historia complicada pero maravillosa al mismo tiempo. Nuestra historia.

(Ahora que lo veo por escrito que satisfacción me produce utilizar el pronombre nuestro. ''Nuestro'',       ''nosotros'', son cosas a las que no me acostumbro y que sigue sacándome una sonrisilla.)

Hoy vengo a decirte a ti y a todo el mundo que ya no concibo mi vida si no es contigo. Y sé que es muy bonito y muy fácil ponerlo por escrito, pero no soy de esas personas que dejan escapar por segunda vez el tren. Me he subido y no pienso bajar a no ser que me tires tú. 
Supe desde el principio que no sería fácil, sé que discutimos mucho y que lo seguiremos haciendo, sé que en esos momentos de debilidad pensamos que lo mejor (lo fácil) sería mandarlo todo a la mierda. 
Pero al final del día lo que me queda, por muchos enfados que tengamos, son esas miradas, esas caricias inconscientes y esa naturalidad con la que fluye todo entre nosotros. 

Sé que cometí un error que me hizo perder puntos, pero lejos de hacerme pequeñita e insegura, ese error es lo que me motiva a demostrarte día a día que eres tú esa persona que me completa. Que como le diría el Sr. Darcy a Elizabeth 

''Ha embrujado usted mi cuerpo y mi alma y que la amo...la amo, la amo, y que ya nada podrá separarme de usted.''

En esta declaración de intenciones quiero dejar claro que voy a ser feliz, y que irremediablemente la palabra felicidad va ligada a tu nombre. Hace tiempo tuve un blog que titulé 'En Busca De La Felicidad' y curiosa la vida, al final no tuve que buscarla porque ella me encontró a mí, tú me encontraste.
Lo quiero todo contigo, viajar, vivir juntos, adoptar un perro, ir a conciertos, quiero enfados y reconciliaciones, pero reconciliaciones mirándonos a los ojos.

Quiero dejar claro también lo mucho que te admiro, admiro tu paciencia, tu perseverancia, te admiro por todo lo que me has enseñado. Admiro esa capacidad que tienes para romper todos mis esquemas. Te admiro porque me motivas a cambiar esos defectillos que tengo. Que a mis ojos son perfectas hasta tus imperfecciones. Y creo que cuando una persona consigue que piense todas estas cosas, no solo que las piense sino que las sienta, esa persona entonces debe ser muy especial. 

En conclusión, te quiero en mi vida ahora y siempre. Y que el dolor que puedo sentir al discutir contigo o al echarte de menos es insignificante comparado con el dolor que sentiría si salieses de mi vida.  Que no me dan miedo las dificultades que se nos puedan presentar, que si es contigo sé que puedo cumplir cualquier objetivo. 
Y el objetivo que me motiva a emprender esta actividad tan particular es ser feliz contigo Alejandro.

Te quiere, tu pequeña esquimal.